jueves, 28 de agosto de 2008

Entrelíneas

Te cuento que Lucy estaba de novia.
Lucy después se casó.
Lucy, por supuesto, se fue de Luna de Miel.
Lucy tuvo su primer hijo.
Lucy y su familia se mudaron a un departamento lógicamente más grande.
Lucy y su familia conocieron Europa.
Todo indicaba que debía buscar su segundo hijo.
Ella no estaba del todo convencida.
Con uno, era mucho más que suficiente.
La carga era grande: ella misma, la casa, él, el hijo, la micro y macro familia, el trabajo que tanto le disgustaba en una escuela secundaria...
Pero no.
Había que complacer, había que hacer lo"esperable"...
Y lo esperable es que tengas pareja, dos o más hijos, casa, trabajo...
Cuando tenés un solo hijo es "raro", es "incompleto".
"Es bueno darle un hermanito al hijo mayor".
"No es bueno ser hijo único".

Y entonces Lucy tuvo su segundo hijo...
Un jodido.
Ese hijo nunca la toca, nunca le da un beso.
Ella sí, ella lo toca, lo acaricia, lo besa, lo mima, le sonríe cuando lo ve llegar de la escuela, cuando se despierta los sábados, los domingos...
Ella lo peina, lo viste.
Ella está "a su servicio".
Le facilita las cosas.
Lo complace.

Él, no.
Él hace todo lo que hay que hacer para quebrar la armonía.
Él pega.
Él grita.
Él es apático con las visitas.
Él es torpe con sus manos.
Él no puede jugar con su hermano sin quejarse, sin "abandonar", sin hacer trampa...
Él no puede hacer una tarea espontánea y "fácilmente"...
Él no puede ir a bañarse sin generar un escándalo previo.
Él no disfruta ni deja disfrutar.
Y aunque él no le da NADA a Lucy, ella le pela, lava y corta las manzanas en los momentos más inoportunos, ella lo despioja, ella le revisa la mochila, le acomoda día a día la cartuchera, le repone los útiles perdidos o rotos, le saca punta a sus lápices, lo prepara para las pruebas, le hace acordar de las tareas, le sirve el desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena, le compra figuritas.
Él se aburre.
Él no sabe qué hacer con su tiempo libre.
Él jode.
Él logra poner al marido de Lucy muy nervioso.
Y entonces el marido de Lucy culpa a Lucy.
Porque ella tiene la culpa de que el nene sea así.
Ella tiene la culpa de que el nene se ponga la ropa al revés, tenga letra fea, no recorte bien, le cueste atarse los cordones, levantar la persiana, usar correctamente los cubiertos...
Tiene la culpa de que pegue, grite...
Y ella es la gran culpable de que el chico no quiera a su abuela paterna.
El nene debe usar anteojos.
El nene debe usar aparatos.
El nene casi no sube de peso año a año.
El nene jamás habla con nenas.
No saluda.
No agradece.
Se resiste sistemáticamente a todo plan familiar de feriados y fines de semana.
Se opone siempre.
¡Cómo grita!
¡Cómo pega!
(A Lucy le duele de verdad).
Convivir con ese hijo es una lucha.
Es un desgaste.
Es pesado.
Y encima ese pelo de mierda que tanto trabajo le da a Lucy.
Y esas cenas y almuerzos que él arruina.
Y los pocos encuentros sociales que se logran concretar, también los arruina.

Pero Lucy no maldice el día en que tomó la decisión de concebirlo "porque eso había que hacer y porque el hijo mayor pidió un hermanito".
No.
Lucy maldice una y mil veces el día en que ELLA fue concebida.
Porque si ese puto segundo en el que su mamá y su papá cogieron sin amor no hubiese existido, ella no estaría ahora harta de esta vida de mierda, pesada, MUY pesada...

Cuatro de abril de ese año.

Todo está bastante mejor.
¿Es porque empecé a escribir y esto produjo cambios en mí?
¿Es porque al detenerme a escribir registro, entiendo, me conozco más, los conozco más?
¿Es una casualidad?
¿Es temporario y comenzará a "fluctuar" en cualquier momento?
Lo mejor va a ser disfrutar este tiempo de paz mientras dure, valorarlo y seguir "alerta" por las dudas...
No decaer.
Yo no pedí más.
Yo pedí esto.
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Cabe aclarar que hay cosas que me intraquilizan: la "observación" que recibió mi hijo menor en el Cuaderno de Comunicaciones, los kilitos de más de mi hijo mayor, próximo Pésaj, encuentro familiar multitudinario en la casa de mi hermano mayor para conocer a la hermana de mi futura cuñada, la posible venida a la Argentina de una amiga mía que vive en el exterior...
Bueno, pero nada grave.
La vida siempre se compone de algunas "incertidumbres", "intranquilidades", "conflictos".
Lo importante es no caer en un pozo nuevamente.
No desgastar la relación con los chicos y con él.
Seguir teniendo "conducta" en la alimentación.
Fuerza.
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Fui a conocer el nuevo departamento en el que hace poco se mudaron el amigo de mi hijo mayor y su familia.
Me invitó su mamá.
Creo que con esta visita, voy a quitarle un poco el objetivo que ella tiene de invitarnos a toda la familia.
El departamento me gustó.
No es nada "guau", pero es amplio, cómodo, luminoso...
Con algo así yo estaría más que conforme.
No hablamos de temas demasiado personales ni profundizamos.
Fue ameno.
La pasé lindo.
Debo valorarlo.

sábado, 16 de agosto de 2008

Del dieciocho al veintinueve de marzo de ese año

Días calmos.
En este lapso se celebró un "sábado de almuerzo" el día viernes 24 de marzo (feriado).
No me puedo quejar.
Bien.
Con sus "cositas", pero bien.
Agradezco a Dios por esto.
Lo valoro.
Logro verlo.

La rutina escolar comenzó.
Todo parece estar encaminado.

Faltaría encontrarle otra escuela de fútbol a mi hijo mayor.

Fuimos del Médico Hebiatra.
Engordó ocho kilos y creció dos centímetros desde agosto del año pasado hasta ahora.
Esto provocó "kilombos" en casa.
Ahora la cosa está más tranqui.
Mi hijo mayor no está gordo.
Yo lo veo "normal".
Pero le quedarían muy lindos dos o tres kilos menos.
Hay que impedir a toda costa que siga subiendo.
No sé muy bien cómo ayudarlo.
Tengo en claro que no puedo "bajar la guardia".
¡Ojo! A los trece años, yo también era "normal"...

Y yo me estoy cuidando...
Se puede decir que LA MAYOR PARTE DEL TIEMPO ME CUIDO.
Igualmente, hubo "descuidos", hubo algunos atracones y hasta hubo... vómitos!
Feo.
Otra vez ese monstruo.
¡A los cuarenta años!
Debo ser fuerte.
Debo seguir.

Justo empezó un programa nuevo en la tele: "Cuestión de peso".
Al final, no pude dar el GRAN PASO de ir al Dieta Club.
Él cree que sí.
Hace "chistes" con eso.
Creo que hasta está "entusiasmado" con eso.
Sólo me suscribí por Internet.
No importa .
Es un avance.
Sé que sola no puedo.
Por más lectura e "intelectualización" del tema, sé que necesito apoyo terapéutico y hsta medicamentos.

Dios, dame fuerza.
Si tan solo esto siguiera así como está, calmo y rutinario, yo estaría satisfecha.
No pido más.
Es sabido.
Es sabido que no pido más.

La mamá del amigo de mi hijo mayor está detrás de un encuentro de ambas familias.
También, quisiera concretar de una vez por todas un encuentro con mis tíos y primos.
Con nuestro amigo Contador y su familia no hay apuro, pero la próxima vez nos tocaría recibir a nosotros en casa.
Quizás mi amiga que vive en el exterior venga con sus hijos de visita a la Argentina.
A mi otra amiga la felicité "indirectamente" por su cumpleaños.
Amigo esposo de mi amiga: ¿Vas a dejar que alguna vez que atienda ella el teléfono o que aunque sea, aparezca el contestador y yo pueda dejar un mensaje?
Amigo esposo de mi amiga: ¿Alguna vez te movés de esa casa?
La hermana de la novia de mi hermano menor vive en el exterior y ahora está de visita junto con su marido e hijos en la Argentina.
¿Debería haber un encuentro para conocernos?
¿Acaso ella lo va a "pergeñar"?

En el último "sábado de almuerzo" se tocó el tema "Pésaj".
Creo que está todo bien con eso.
Dios, que él no se enfurezca.
Que siga así.
Por favor...

Y yo, no debo dormirme.
Tengo que estar muy despierta.
Ponerme las pilas.
Me estoy por indisponer.
Sé que por eso habrá un bajón físico, pero debo ser ASTUTA.
Muy astuta.
Me conviene...

viernes, 15 de agosto de 2008

Dieciocho de marzo de ese año

Si mi hijo menor quiere llevar golosinas que se derriten en su bolsillo, justo antes de ir todos al cine, no debo sugerir otra cosa.
Callar y aceptar.

Si mi hijo menor quiere llevar golosinas que se derriten en su bolsillo, justo antes de ir todos al cine, no debo sugerir otra cosa.
Callar y aceptar.

Los cubiertos SIEMPRE deben estar secos.
Los cubiertos SIEMPRE deben estar secos.

Debe haber siempre repasadores limpios a mano.
Debe haber siempre repasadores limpios a mano.
Si mi hijo menor quiere llevar golosinas que se derriten en su bolsillo, justo antes de ir todos al cine, no debo sugerir otra cosa.
Callar y aceptar.
Los cubiertos SIEMPRE deben estar secos.
Debe haber siempre repasadores limpios a mano.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.
Si mi hijo menor quiere llevar golosinas que se derriten en su bolsillo, justo antes de ir todos al cine, no debo sugerir otra cosa.
Callar y aceptar
Los cubiertos SIEMPRE deben estar secos.

Debe haber siempre repasadores limpios a mano.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.
Si mi hijo menor quiere llevar golosinas que se derriten en su bolsillo, justo antes de ir todos al cine, no debo sugerir otra cosa.
Callar y aceptar.
Los cubiertos SIEMPRE deben estar secos.
Debe haber siempre repasadores limpios a mano.
La mesa siempre debe estar despejada, seca y limpia.

Ideas ordenadas

Noto que los llamados telefonicos importantes se producen, nada más y nada menos, justo cuando debo preparar la cena.
¡Doble cena!
Porque a partir de ahora, primero comen los chicos y después, "el señor".
Entonces es muy importante tener la cena avanzada.

Primero: tareas de mi hijo menor y la cena.
Después, todo lo demás.
Y todo lo demás es: ocuparme de la ropa sucia, de las mochilas, de contestar mails, de mi ropa del día siguiente, del uniforme que se pondrá mi hijo menor, de escribirle a mi empleada doméstica...

Así podré atender el teléfono sin retrasar la cena y evitaré "escandaletes" del señor...

Yo me pregunto: ¿No se dan cuenta mi hermano menor, la esposa de mi hermano mayor, mi tía, la amiga de la familia (esposa de nuestro Contador) y otros, de lo inconveniente de ese horario?
No. Evidentemente, no.
Evidentemente ninguno de ellos prepara la cena a esa hora.
Alguien lo hace o lo hizo o lo hará por ellos.
(Tirarán unos fideítos en una cacerola de agua hirviendo o quizás se conformarán con un bife a la plancha con un tomate al medio. Acá no es así. Para nada es así de fácil y sencillo).
Debo atenderlos igual.
Es importante.
Es bueno que los chicos vean-escuchen que suena el telefono y se atiende y se habla.
Sin miedo.
Es bueno.
Es cuestión de organización.
De previsión.

Con "kilos" y "sábados de almuerzo": todo OK.
Al menos, por ahora.
Sólo leyendo estos escritos y registrando todo en mi cabeza y mi accionar lograré "sostener" esto.
NO TENGO QUE AFLOJAR.
Lo tengo que tratar bien.
Es fundamental.
¿Comprendido?

Catorce de marzo de ese año.

Llamó mi tía...
Y la atendí!

Llamó la esposa de mi hermano mayor...
Y la atendí!

Llamó una amiga de la familia,
la esposa de nuestro Contador...
Y la atendí!

La llamé a ella.
Le comenté sobre una charlas en hebreo que dan en AMIA y que tanto me recomendó una clienta del Estudio, que a su vez es conocida de ella.
Parece que le gustó la idea.

Le conté sobre mis hijos.
Expliqué mucho.
Demasiado.
Le cuento por demás de nuestras rutinas como si tuviera que "rendirle cuentas".
Habloyhabloyhablo...
Me parece que cuando le cuento que ayer mi hijo mayor, junto con mis primos y ex vecino-amigo fueron juntos a jugar al Paddle se produce un incómodo silencio.
Hablo por demás.
(Tengo que aprender a cuidarme de una vez por todas).
Le explico que esto que hicieron ayer no lo van a hacer semanalmente, que fue una excepción...
Sigo sintiéndome incómoda.
Hay algo del otro lado del teléfono que me hace sentir incómoda.
¿Qué carajo pasa?
No estoy segura pero creo que se trata de que el año pasado ella "presionaba y presionaba" con salir con mi hijo mayor día de semana previo a día hábil.
Y él se oponía.
Y yo, en el medio.
Para variar.
Varias veces ante estas propuestas-presiones tuve que "dar la cara" y decir: No.
- "No, porque al día siguiente hay clase, tiene que hacer tareas y blablabla".

¿Será por esto que no le gustó que mi hijo mayor jugara al Paddle ayer?
Un día de semana previo a un día hábil.
No sé.
Tiene la "habilidad" de hacer sentir al otro en falta.

Desde muy niña que me siento así. Era muy difícil satisfacerla. Qué digo, era imposible.
Eternamente disgustada. Eternamente quejosa. Pobrecito mi hermano mayor. Él también sufría mucho. Él hasta sufría más que yo. Hasta el día de hoy que sufre más que yo.
¡Ay! Mierda.

¿No deberías, por el contrario, estar contenta de que mis hijos se vinculan, hacen deporte, son sanos, buenos alumnos?
¿Y ese mail que le mandaste a mi hijo mayor?
"Que en noviembre puedas decir 'hasta marzo' ".
¡Qué presión!, ¡Por Dios!
¿Y qué si no puede decir "hasta marzo"?
¿Y qué si se lleva una materia?
Basta de vos.
Lográs que un día que podría ser encantador, decaiga.

Tampoco puedo dejar de llamarla porque si pasan unos días y no sé "en qué andá", siento que algo peligroso se puede andar "gestando".
Turra de mierda.
Me tiene atrapada.
Enredada.

Teórica y supuestamente "tocaba" este sábado que organizara uno de sus malditos "sábados de almuerzo".
La invitación no llegó.
Quise "averiguar".
Entonces, en esa conversación telefónica que tuve con ella aproveché para preguntarle qué actividades extraescolares hace mi sobrino-su nieto, para ver si la mano venía por ahí, si la no- invitación se debía a que el nene no iba a poder venir.
Porque para ella o vienen todos o no viene nadie. ¡Infeliz! ¡Soreta!
Dijo: "Tiene Circo los sábados de tres a cinco de la tarde".
Y muy rápidamente agregó: "pero para cuando todo vuelva a la normalidad (sic) y podamos almorzar los sábados, Circo es muy cerca de acá, lo pueden llevar y traer y eso no va a interferir".

Acá hay un "misterio".
¿A qué se refiere con "cuando todo vuelva a la normalidad"?
Suspendió nuestros tradicionales desayunos semanales cpn la excusa de los alumnos y yo ya comprobé que la excusa es falsa. Muy falsa.
Y ahora estos sábados suspendidos sin justificación entendible.

Solo espero que ese "misterio" esconda algo bueno o neutro.
NADA QUE ME PUEDA AFECTAR.

Ahora, eso sí, ¿Por qué carajo no me contás LA VERDAD alguna vez en tu vida?
¿Creés que soy BOLUDA?

Dueña de mí

Con mi hijo mayor, todo mal.
De su primer día de clases, me enteré un cinco por ciento.
Hoy se "rebeló" y no llevó celular.
Llueve y fue en colectivo con zapatillas viejas que ayer fueron lavadas y que aun están... húmedas!

Hoy peso menos que ayer.
No debo decaer.
Es importante no recuperar lo que ya bajé.
Lo que ya logré.
Mantener o descender, pero no recuperar.
No fue difícil, pero ¡ojo!
Ya hubo en mi haber muchos "comienzos de dieta".
Que esta vez no sea "una más".
Debo acordarme mucho de la SALUD.
De mis hijos, del ejemplo...
Aunque sea, que el objetivo no sea tanto lo estético.
Debo mejorar.
No es tan difícil.
Tengo un aceptable pasar económico.
Eso es importante.
Eso me da la posibilidad de darme el "lujo" de comprar productos como aceite de oliva, palmitos, kani kama. Son comidas que me gustan y que ayudan a que la dieta sea más llevadera.
Quiero mejorar el pelo, la piel, los dolores de pies...
Está relacionado con la comida.
Yo sola decido qué entra por mi boca.
En eso soy dueña yo Y NADIE MÁS QUE YO.
Dios quiera que SIEMPRE desee que por mi boca entre calidad y cantidad adecuada de comida.
El resto, vendrá solo.

domingo, 10 de agosto de 2008

Cero astucia; mucha bobez.

Mi hijo mayor fue a jugar al Paddle con ex vecino-amigo y mis dos primos, mientras mi hijo menor estaba en Ping Pong , en el nuevo club, probando su primera clase.
Yo sabía que iba a tener que "pilotear" esto y que debía ser reservada y no comentarle nada a mi hijo menor respecto de la actividad de los más grandes.
Pero no pude. No supe.
Y cuando terminaron de jugar al Paddle cayeron todos un día de semana.
Era un día de semana de la segunda semana de clases de mi hijo menor.
Un día de semana de la primera semana de clases de mi hijo mayor.
Un día de semana de la semana en que mi hijo menor hacía sus primeras experiencias en el nuevo club.
Un día de semana a las veinte horas !!??
Sí, "cayeron" mis dos primos, el ex vecino-amigo y mi hijo mayor a casa un día de semana a las veinte horas.
No negaré que fue un lindo encuentro.
Pero recién a las nueve y veinte de la noche se fueron.
Y a esa "altísima hora" y cuando los chicos ya debían estar "cenados", yo recién empezaba a preparar la cena, el día siguiente era hábil, la casa era un caos y, lo peor, mi hijo menor se sintió literalmente "garcado" por su hermano.
Porque él se enteró en ese momento del encuentro de los "grandes" y consideró que él debió ser el cuarto integrante de ese juego de Paddle...